El Arsenal, una filosofía condenada al fracaso.

Arsenal, todo aquel que entienda algo sobre fútbol y escuche estas 7 letras sonar en voz alta enseguida lleva su mente al apartado del espectáculo, fútbol de toque, oportunidades a jóvenes valores, pero sobretodo poca o nula rentabilidad a sus esfuerzos o intenciones, que son verdaderamente admirables, pero que desgraciadamente no son las que más frutos dan.

Tanto es así, que la orquesta sinfónica de Londres lleva 7 años sin ganar un sólo título, y esta última fue una FA Cup en la 2004/05.Ademas, su última liga data tambien de hace bastantes años(2003/04), aunque eso si, lo lograron siendo el único equipo terminando una liga entera imbatido, The invincibles fue el apodo que recibieron los hombres capitaneados por Patrick Vieira.

Como recordambamos al principio, todo aquel que haya visto jugar al Arsenal, será conocedor de que su fútbol es históricamente el más entrtenido y alegre del planeta, y pese a no dar muchos resultados, gente de todo el mundo tiene al Arsenal como su club favorito, por su apuesta por un fútbol bonito practicado por gente jóven y con talento, como es el caso de los que actualmente lo llevan a cabo, los Wilshere, Gervinho,Walcott, Chamberlain, Ramsey, Alex Song...

Con este estilo de juego y con la inercia que llevaba el club durante estos últimos años, perdiendo 2 finales(Carling y UCL) en la última década y no siendo capaz de superar a sus rivales directos en la tabla, nadie podía pronosticar que los gunners serían capaces de endosarle cinco goles al todopoderoso Chelsea de AVB, y menos en el Bridge.

Robin Van Persie, consiguió un hat-trick el pasado sábado ante el Chelsea.

Pero, en esta historía de romanticismo entre un equipo de fútbol y el propio deporte, el milagro se obró y con Robin Van Persie como capitán del navío gunner el Arsenal consiguió levantarse de hasta 3 golpes fuertes, para llevarse los 3 puntos al norte de la capital inglesa.
Ni Terry, ni Lampard ni ninguna estrella del Chelsea pudo frenar las ilusiones de los gunners, que con modestía y con el buen fútbol como bandera conquistaron Stamford Bridge en una soleada mañana que llegó a todos los rincones del mundo y que ademas hizo vibrar a mucha gente, que veía como la filosofía honesta y sacrificada del Arsenal arrollaba a las libras de algún que otro magnate ruso.

Gracias Arsenal por este homenaje permanente al fútbol.